Tenia ganas de volver a hacer un poco de deporte de orientación. Ya quedaba lejos la participación en la prueba de Monreal del Campo y, la verdad, he competido muy poco este año. Repasando el calendario me he dado cuenta que sólo he participado en esa prueba y, además, los puntos que conseguí no me los han computado en la Liga Aragonesa por lo que no salgo en clasificación. Estoy desaparecido. No me estraña que tuviera ganas. Además, la prueba de orientación de las fiestas del Pilar de este año se celebraba muy cerca de mi casa, en los Montes de Juslibol, por lo que resultaba muy cómoda.
El domingo 9 de noviembre salió un día muy bueno, no muy frio y algo ventoso. Salí de casa sobre las nueve en bicicleta y bajé rápidamente desde San Gregorio hasta el "galacho" en poco mas de veinte minutos. Tenía la salida a las 10:05AM por lo que tuve tiempo suficiente para calentar y hacerme una idea clara de como iba a ser la competición.
La zona del "galacho" es un entorno natural de reducidas dimensiones pero de gran variedad de terrenos y paisajes. Una zona llana donde se extienden los galachos, bordeados de una vegetación espesa pero reducida al limite cercano de las masas de agua, un cortado vertical de materiales poco compactos y una zona superior, entre los cortados y el campo de maniobras de San Gregorio, estepárea y con mucho relieve (vaguadas) con algunas masas de pinar bastante reducidas. Eliminados de la zona de competeción los sotos del galacho (entorno natural protegido) la duda era saber cuantas veces tendríamos que subir el cortado (vertical y con pocos fallos por los que poder superarlo). Calentando por la zona de recepción del "galacho" la cosa se fue clarificando, sólo había dos subidas balizadas y lo lógico era que una fuera para subir y otra para bajar (por lo tanto subir una sòla vez); parecía razonable que la competición se desarrollara en su mayor parte en la zona superior con alguna baliza en la parte cercana a los galachos para terminar la prueba. El recorrido de H35 fue así.
En cuanto al mapa, para la liga resulta un mapa pequeño con mucho relieve y poco bosque (por lo tanto de orientación facilita) no es un mapa para hacer muchas competiciones. Además tiene el riesgo añadido de unos cortados muy verticales y bruscos poco perceptibles desde arriba. Transitando por sus proximidades no se pueden tener errores. Sin embargo, es un mapa de orientación a veinte minutos de casa y eso es de un gran valor para mí. Ya tengo cartografiado el terreno de juego por donde corro, voy en bici y ... ahora puedo practicar orientación.
En lo deportivo la prueba tuvo su parte negativa y su parte positiva. La parte negativa es que arruiné la competición en la segunda baliza, no salió bien el primer rumbo y en lugar de priorizar la información del mapa (primero el relieve) busqué nuevos puntos de ataque para rumbos cortos que creía fáciles. Me obcequé en esa idea y perdí mucho tiempo buscando puntos de ataque en lugar de la baliza. Finalmente, como ocurre casi siempre en estos casos, antes de abandonar sigues a un competidor que parece que va a buscar esa baliza y esperas que te solucione la papeleta. Afortunadamente fué así (pero tardé 21 minutos en encontrar la segunda baliza; resolver este asunto serán las primeras prácticas de orientación con este mapa). La parte positiva es que el resto de la prueba salió muy bien, la orientación cada vez era más precisa y físicamente regulé bien los esfuerzos y tuve fuerzas suficientes para terminar con ganas de correr por los llanos del "galacho". Al final 1h:42':16''
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