27 febrero 2011

Esquí de Travesia. Garmo Negro


El pasado día 6 de febrero de 2011 el grupo de esquiadores habitual del C.M.Pirineos nos planteamos la posibilidad de ascender el Pico Garmo Negro (3066mts) con esquies. No es un pico que se encuentre en buenas condiciones con frecuencia y este año, con la escasez de nieve, presentaba una oportunidad que no podíamos desaprovechar. Planteamos la ascensión por la ruta clásica de invierno por la Mallata baja y la Mallata alta.

Sobre las 10:30AM iniciamos el ascenso con las tablas en la mochila por el zigzageante sendero que atraviesa el bosquete de pinos de la parte baja del Garmo Negro. Sobre los 1800 metros abandonamos el camino y, por encima del primer paralud del barranco de Argualas, pasamos a la ladera de su margen derecha por la que se extendía un homogéneo y continuo manto nivoso por el que ya podíamos ascender con los esquies en los pies. Al alcanzar la llanura de la Mallata Baja, donde confluyen los barrancos de Ordicuso y Argualas, continuamos al noreste para acceder al barranco de Arnales y continuar la ascensión remontando su curso por las suaves lomas de la Mallata Alta. Sobre los 2200 metros abandonamos el curso del barranco de Arnales, que desciende del Collado de Pondiellos y los Ibones de Arnales, para continuar claramente al oeste hacia un estrecha vaguada que se orienta hacia la base del pico Argualas.

Cuando la vaguada se difumina en las pendientes que descienden de la muralla rocosa del Argualas giramos al norte para bordear la cara este del Argualas y acceder al repecho que nos permite ascender hasta el elevado "plateau" que se abre entre los picos Garmo Negro, Algas y Argualas. Esta pala bajo el Argualas es la pala peligrosa. Se trata de una media ladera sobre una pendiente de mucha insolación y es la ladera donde, tradicionalmente, se producen los aludes. Sin embargo este año estaba en buenas condiciones.

Cuando la pared rocosa del Arguales cede y se abre una empinada ladera con una recortada cornisa superior volvemos a girar al oeste para remontar esta pendiente, más exigente y umbría, y llegar a la base de los picos del macizo de Garmo Negro. Desde el "plateau" sólo queda remontar la ladera somital del Garmo Negro, poco menos de 200 metros de desnivel muy exigentes, por la altitud y la pendiente.

Muy dispersos, prácticamente de uno en uno, vamos llegando a la cima, que por la acumulación de nieve es pequeña y estrecha. Cuando llega el último los primeros ya empiezan a bajar. No hay mucho sitio y tampoco hay tiempo que perder. Conforme nos acomodamos comenzamos la parafernalia habitual: quitar focas, preparar el material para el descenso, comer, beber y disfrutar del paisaje mientras recuperas el esfuerzo de todo el dia. Han sido cuatro horas de ascenso con mucho calor. El día es espléndido y la recompensa un maravilloso tesoro de vistas y panorámicas dificil de guardar en fotos.

El descenso con esquies siempre es la parte divertida y más esperada de la actividad. Sin embargo, hoy, la nieve no estaba en buenas condiciones para nuestro nivel de esquí. Muy profunda y pegajosa exigía mucho trabajo en cada giro. Sólo en las zonas donde estaba un poco helada se podía esquiar con cierta comodidad. Finalizada la estrecha vaguada que permite acceder a las laderas superiores la pendiente cede y esquiar se reduce a deslizar sin giros sobre las suaves pendientes de la Mallata Alta y Mallata Baja. Un grupo de rezagados decidimos evitar este largo y suave descenso atajando por la estrecha barranquera superior del barranco de Argualas pero estaba sin nieve en la parte inferior y tuvimos que solucionar una incómoda "embarcada" que nos dejó en las pendientes superiores de la Mallata Baja. Poco después nos quitamos los esquíes y terminamos de bajar hasta los Baños de Panticosa y el refugio de la Casa de Piedra.